Título: Los tres nombres del lobo
Autor: Lola P. Nieva
Editorial: Vestales
Año de publicación: 2013
Género: narrativa/romance/aventura/histórico
Formatos: Ebook e impreso
Sinopsis:
Una novela que narra un viaje interior: una mujer que busca conocerse a
sí misma. Desde la refinada sensibilidad árabe al ímpetu vikingo, en una
travesía personal, íntima, en la que se abrirán nuevos paisajes,
conocerá otras lenguas, costumbres, el placer de una gastronomía
diferente, bailes, vestimentas, el despertar de los sentidos.
Una novela que narra la educación de los sentimientos, el
aprendizaje de la sensualidad, el descubrir del erotismo, la invención
del apasionado desenfreno. Un viaje para trazar un camino único, el
recorrido del propio destino.
"A veces yo también deseo devorarte para que formes parte de mí, para
tenerte en mi interior y protegerte de todo, para sentirte más cerca,
para que seamos uno. Sé que lo que sentimos no es corriente; es algo
diferente, más fuerte, más caótico, más intenso; casi sobrenatural."
Esta es hasta el momento la reseña más larga que he
hecho así que será mejor que lean sentados.
Voy a desviarme un momento para hacer esta
introducción. Sin duda un tema controversial, un psicólogo, un psiquiatra y un
experto en lo paranormal difieren en sus conceptos. Era una niña cuando conocí
este tema de la reencarnación y me sentí muy atraída por eso. Seguramente
muchas latinoamericanas recordamos la famosa telenovela mexicana “El extraño
retorno de Diana Salazar” protagonizada por la entonces preciosa actriz del
momento Lucía Méndez. Tocar temas paranormales se volvió una especie de tendencia
que fueron llevadas a la pantalla chica en los 80’s y 90’s y haciendo que más
de alguno tuviera pesadillas al respecto. El sólo primer capítulo de la novela
atrae porque la historia comienza en la Zacatecas de 1640, (esa fecha dice la
novela no la canción) en donde la preciosa Leonor de Santiago, hija de un
marqués es la prometida del capitán don Eduardo de Carbajal pero como no todo
es amor y felicidad y menos en una época donde estaba el auge de la inquisición
la villana de la historia Lucrecia Treviño hace de las suyas impidiendo el
compromiso, irrumpiendo en la fiesta y acusando a Leonor de brujería frente a
todos los invitados en cuenta un recién llegado comisionado del santo oficio
que obvio se tragó todo el cuento y más cuando Leonor se altera y responde a la
provocación de Lucrecia descontrolándose y haciendo crecer un ambiente
sobrenatural que hace que con sus gritos se tambalee el candelabro central del
salón desprendiéndose y cayendo al suelo ante la vista atónita de todos.
Lucrecia odia a Leonor porque don Eduardo la prefirió a ella lo que no contaba
era que sus planes no iban a salir bien ya que no logró que se llevaran sólo a
Leonor sino también a don Eduardo por defenderla. Fueron sometidos a juicio por
la inquisición y condenados a morir en la hoguera, por lo que Lucrecia decide
suicidarse colgándose de un árbol al saber que don Eduardo también morirá, es
en la hoguera donde los enamorados se juran amor eterno ante las llamas que
comienzan a crecer y Leonor cae en una especie de letargo que la debilita, al
momento la escena cambia a la época actual y tras gritos en medio de la noche
Diana despierta llorando porque el sueño que ha tenido la ha descontrolado.
¿Cómo termina la historia? Pues resulta que el mismo trío se encuentra de nuevo
en el siglo XX y bla, bla, bla, la villana que se llama Irene del Conde aprovecha
la visita de los enamorados a un museo (que resulta ser la casa donde vivió
Leonor) y le dispara al susodicho dolida porque vuelve a pasar lo mismo que
pasó siglos atrás lo que hace despertar el poder telequinético e incontrolable
de Diana a quien también le dispara y en su odio por ver a su amado moribundo
Diana eleva por los aires a Irene (Lucrecia) para cobrarse lo que le ha hecho y
la clava en una estaca que sobresale de un escudo de armas que la traspasa por
completo. Los amantes se mueren y es allí donde la Leonor del siglo XVII
despierta de lo que se supone fue su visión de un futuro y se ve de nuevo en la
hoguera. Afortunadamente un perdón del virrey de la nueva España llega a tiempo y la inquisición se ve obligada
a detener la ejecución.
Esta fue la primera historia de la que tuve
conocimiento en este tema de la reencarnación y desde allí comencé a sentirme
atraída, luego más grandecita conocí la experiencia del actor Glenn Ford de
quien se dice tuvo muchas vidas pasadas y de un libro de quien no recuerdo el nombre
de la autora que dice que tuvo otra vida y que murió decapitada durante la
revolución francesa, luego recordando esta película de “La momia regresa” se
vuelve a tocar este tema cuando vemos a una Evelyn más madura en cuanto a su
torpe personaje de la primera película y donde descubre que los sueños y
visiones que ha tenido no son producto de su imaginación sino porque resulta
ser la reencarnación de una princesa egipcia y de allí la trama de la película.
El fin es que es un tema fascinante del que se puede hacer fiesta al momento de
echar volar la imaginación (siempre y cuando ir cuidadosamente de la mano de la
investigación) unas veces ficción otras veces biografía pero volviendo a lo que
vine fue por todo esto que decidí leer este libro que estoy presentando y como
ya hace mucho que se publicó no me preocupa dar spoilers porque ha sido uno de
los libros más leídos y me arrepiento no haberlo leído yo antes. Me refiero a
“Los tres nombres del lobo” de la autora española Lola P. Nieva una historia
fascinante que trata de manera perfectamente bien detallada la experiencia de
Victoria Montalbán y las vidas que tuvo en su agitado pasado. Una historia en
que la que el tema de la reencarnación atrapa desde el principio.
Hace mucho que no leía un libro que me obsesionara
y cuando digo obsesión me refiero a no querer dejar de leerlo y eso me pasó con
este, cuando te sientes identificada con ciertas situaciones, cuando eso te
atrapa y cuando te metes de lleno en el asunto sencillamente ya no se puede
parar, por primera vez me desvelaba hasta la una o dos de la mañana leyendo y
no escribiendo porque esta lectura es realmente una aventura y más si se trata
del pasado como es mi gusto por lo que resumiendo diré que ha sido uno de los
mejores libros que he leído en cuanto a calidad se refiere y no sólo de la prosa
y estilo sino de todo lo que el libro es y tanto me afectó la historia que
necesité una semana para asimilar todo y luego con calma escribir estar reseña.
Me gusta el estilo de la narrativa de su autora, el lenguaje que utiliza, me
gusta como trata el romance, la sensualidad y el erotismo y algo que me dio
gusto leer: su manejo de la primera persona en la historia ¿se puede estar más
conectada? En mi caso conecté de inmediato, si te gusta la histórica, un
lenguaje rico y deseas instruirte en otras culturas este es de esos libros
porque cada capítulo te mantendrá atrapada y con ganas de saber lo que sigue.
Sin duda los adjetivos se quedan cortos para calificar esta obra.
Hice esta reseña haciendo un resumen de cada
capítulo del libro para que se entienda mejor.
Capítulo 1
Retazos del pasado
“Relinchos de caballo, alaridos de dolor infrahumano, entrechocar de
metales, demonios de pelo largo y ensangrentado despedazándose entre sí.
Cuerpos mutilados, retorcidos, amontonados.
Oscuridad rota
por hebras rojizas, y una lluvia fina pero persistente.”
Suficiente
intro del primer capítulo para que esta lectura atrape y saber lo que le está
pasando a Victoria, la protagonista que lleva meses teniendo extrañas
pesadillas que han cambiado su personalidad y la llevan a dudar de su lucidez.
“¿Qué me estaba pasando? ¡Había reanudado una pesadilla estando
despierta! Aquello estaba llegando demasiado lejos. Mi vida se estaba
derrumbando como un castillo de naipes. Nada era normal ya, ni siquiera yo
misma.”
“Me senté en una mesa apartada y miré pensativa por el
ventanal. Llovía. A mi alrededor oía comentarios respecto del tiempo, sin
embargo, yo adoraba la lluvia, las tormentas, los días nublados y el viento.
También me fascinaban la naturaleza, los parajes verdes, el mar. Anhelaba poder
viajar por el mundo, vivir una vida bohemia y despreocupada allí donde
quisiera, desligarme de lo material, de los compromisos, de la hipocresía, del
tumulto de las ciudades, de la contaminación. Algo casi imposible.”
Acompañada
por su novio decide visitar a un médico especialista en el que supone es su
problema y ninguno de los tres se imaginan la aventura que están por vivir.
“Yo tampoco creía en la reencarnación; no creí hasta
que presencié una de aquellas sesiones. Desde entonces, me interesé por el
tema, lo estudié a fondo y puedo decirle que incluso ha cambiado mi vida, mi
forma de ver las cosas, mi filosofía. Ahora comprendo cosas que antes no
entendía. Jamás creí en la justicia divina. ¿Cómo iba a creer en ella cuando
personas mezquinas recibían lo mejor de la vida, mientras que gente de buen
corazón era víctima de continuos mazazos?”
Dr. Valmoral
“Comprendí que la determinación de triunfar en mis
metas no era más que la esperanza de alejar de mí esa apatía extraña y oscura.
Asombrosamente descubrí que me había sentido sola a
pesar del cariño, del apoyo, de la fortuna.”
“Y, tal vez, por mucho que lograra triunfar en la
vida, por mucho que llegara a conseguir, jamás sería del todo feliz.
Era como si me faltara algo, como si mi vida estuviera
incompleta. Cada vez estaba más segura de que la clave poda estar en mi otra
vida.
Y, por primera vez, empecé a creer que quizá las
pesadillas me estaban ayudando, que eran parte de mi destino. Porque, ¿de qué
valían los éxitos, la seguridad, la satisfacción si no ayudaban a conseguir la
auténtica felicidad?
Esa era la verdadera meta: la felicidad plena y
absoluta. Y yo la deseaba por encima de todo. Haría lo que fuera con tal de
conseguirla, barrería cualquier obstáculo por muy intrincado que fuera o, por
muy lejos que estuviera, viajaría hasta el fin del mundo o hasta la más ignota
de mis vidas. Cualquier cosa con tal de transformar el gris de mi existencia en
un arcoíris de colores. Ya era hora de que mi corazón comenzara a latir y tenía
la certeza de que mi vida aparentemente perfecta iba a cambiar. No podía ser de
otro modo.”
Victoria
decide de una vez enfrentarse al origen de sus pesadillas si la regresión es la
única manera.
Capítulo
2
El viaje a mi interior
Durante
la sesión de regresión Victoria se encuentra en la Toledo musulmana del siglo
IX (año 843 d. C.) llamándose Leonora y próxima a ser comprometida con Rashid,
un musulmán nacido en Toledo, dueño de propiedades y tierras y en camino a
convertirse en uno de los terratenientes más respetados de la región, por lo
tanto la novia tenía la obligación de cambiar sus costumbres al islam y
llamarse después Shahlaa.
“Rashid iba acompañado por su padre. Cuando nuestros
ojos se encontraron, sentí que se me secaba la garganta. Su mirada gatuna y
negra como una noche sin luna me recorrió con lentitud para absorber cada
detalle de mi cuerpo. Su insolencia me encontró desprevenida: sentí un
creciente desagrado y bajé la mirada.”
“Miré sorprendida a mi prometido. Estaba más que
apuesto. Iba ataviado con zaragüelles de seda abombados hasta los tobillos en
color vino, babuchas de suave piel marrón, túnica corta de seda negra con damascos
en oro, turbante de lino negro y un fajín dorado que le ceñía la cintura y del
que sobresalía una daga curva.
La sonrisa que brilló en su semblante me desarmó y me
arrancó otra casi sin darme cuenta.
—Desde que vi a su hija, sus ojos me han perseguido
hasta la locura. Su belleza me perturba y no pienso en otra cosa más que en
hacerla mi esposa.
Su voz grave pero suave fue casi un murmullo.”
Capítulo
3
El dulce néctar de la pasión.
La
aparente vida feliz y tranquila de Leonora se ve sacudida cuando su Rashid
decide casarse otra vez (costumbres musulmanas que se pueden prever) y aunque
se trate de simples negocios “la otra” no pierde el tiempo para jugar sus
cartas y hacer pender de un hilo el amor entre Leonora y Rashid que comienza a
caerse como cartas de naipes debido a la situación de una fiesta en la que ella
“ofende y humilla” a su marido y familia logrando el repudio.
“Lo había hecho. Ya no había vuelta atrás. Fue la
noche más larga de mi vida. Me arrepentí de todo, pero ya era tarde para
lamentaciones. Mi vida descansaba en ruinas a mis pies. Amaba a un hombre que
ahora me odiaba y, después del espectáculo, mi historia circularía por toda la
ciudad como el fuego recorre una rama seca. ¿Qué sería de mí? Repudiada y sola.
No pensé que la vergüenza también afectaría a mi familia. Sentía los ojos secos
y el alma vacía.”
Capítulo
4
Pérdidas
Un
embarazo muy deseado llega cuando nadie se lo esperaba haciendo que los planes
de repudio y divorcio se disuelvan entre Leonora y la familia de su esposo pero
“la otra” llena de rencor, celos y envidia hace lo suyo para interrumpir la
gestación de la que cree su rival. A pesar de perder el bebé el amor entre
Leonora y Rashid se intensifica más y para aliviarla más decide que vayan a
Sevilla, ciudad donde radica el verdadero padre (y también árabe) de Leonora a
quien ella desea conocer.
“—Voy a soñar toda mi vida con tu imagen echándote
agua por el cuerpo. Eres la mujer más sensual que conozco.
Me miró pensativo. La firme línea del mentón se
endureció apenas, sus labios se ensancharon en una resplandeciente sonrisa.
—Vamos a viajar a Sevilla —anunció.
—¿Có… cómo?
Inmediatamente los latidos de mi corazón se
aceleraron.
—Has perdido un hijo, es justo, pues, que ganes un
padre.
Lo abracé emocionada; hasta ese momento, no me había
percatado de lo feliz que aquello me hacía.
—Te amo, mi dulce Rashid.”
Capítulo
5
El principio del fin (año 844 d. C.)
El
emotivo encuentro entre padre e hija se realiza pero a su vez también llega la
desgracia que sella el destino de Leonora y Rashid, Sevilla ha sido atacada por
una horda de bárbaros vikingos que masacran a todo ser vivo, hieren de gravedad
a su recién conocido padre y también a Rashid, a ella la raptan.
“Mi captor me apretó contra su cuerpo y me miró con
fijeza. Era un guerrero enorme de aterradores ojos verdes. Me debatí colérica.
No conseguí separarme ni un ápice. La expresión atormentada de
Rashid fue lo último que vi. Fui cargada nuevamente
sobre la espalda del bárbaro y llevada como un objeto por las callejuelas. Una
voz, la voz de mi amor, llegó hasta mí.
—¡Juró que te encontraré! ¡Estés donde estés, te encontraré,
Shahlaa!
Su voz se rompió en un aullido estremecedor. Su rabia
reverberó en las paredes del callejón como un eco que rebotaba partiéndome en
mil pedazos.
—¡Rashid! —vociferé rota de dolor.
—¡Shahlaa, Shahlaa, mi Shahlaa…!”
Fue mi nombre lo último que escuché. Tambaleada y
derrotada, me sumí en la negrura más absoluta.”
Capítulo
6
Esclava del destino
Como
esclava de los bárbaros parece ser el destino de Leonora, todo su mundo le fue
arrebatado en segundos y ahora debe convertirse en una mujer diferente si
quiere sobrevivir. En el barco que la lleva es salvada de una violación por
Gunnar, llamado “El Temible” el vikingo de ojos esmeraldas que se clavaron en
ella y para que ella pueda ganar tiempo para ser rescatada por su esposo decide
seducirlo y jugar sus cartas aunque poco le gusten los métodos a utilizar
porque al jugar ella podría terminar siendo el juguete de las circunstancias.
“—No tienes ni idea de cuánto vas a tener que cambiar,
apenas serás una sombra de lo que eres. Si quieres sobrevivir a esto, deberás
amoldarte a tu nuevo destino. —Hizo una pausa—. Con el tiempo, llegarás a
olvidarte del pasado, porque recordarlo será demasiado doloroso.
—Jamás lo olvidaré —espeté con decisión.
—Peor para ti.”
Capítulo
7
Un cortejo inesperado
Un nuevo
nombre la bautiza en tierras vikingas, Gunnar que se siente atraído por ella la
llama “Freya” y será de él mientras otro no la reclame.
“—¿Te llamas Shahlaa?
Asentí. Tragué saliva, era la primera vez que
pronunciaba mi nombre. Su voz era tan distinta a la de Rashid, sin embargo, el
tono fue parecido. ¿Lo habría dulcificado a propósito?
—¿Qué significa?
—Ojos maravillosos —contesté alterada por su cercanía.
Pensé en que debía aprovechar la oportunidad. Sin embargo, la constante mención
a Rashid me lo impedía.
—Muy apropiado. —Su mirada penetrante pareció escrutar
mi alma—. Sin embargo, aquí serás Freya, mi
Freya.
—Querrás decir la Freya de tu jarl.
Negó con la cabeza, su aliento cálido me acarició los
labios.
—Soy el hersir
del pueblo, la máxima autoridad aquí y, hasta que el jarl no te reclame, serás mía.”
Capítulo
8
El nacimiento de un lobo
Los
planes calculadores y llenos de maldad por parte de una antigua enemiga de
Freya hacen de su existencia más miserable, un plan bien urdido desata un
concilio donde un supuesto “traicionado” le da un escarmiento a su traidor
teniendo como premio a Freya quien es golpeada y violada sin que nada pueda
evitarlo, su vida y sentimientos se debaten en lo que es y en lo que se está
convirtiendo.
“Apreté los dientes y me juré que Amina también
pagaría su perfidia. No me marcharía sin vengarme. Cerré los ojos y lloré. Fue
un llanto desconsolado; lloré su dolor y el mío.
Otro pensamiento me asaltó. ¿Podría contarle todo
aquello a Rashid? ¿Me miraría como siempre? ¿Seríamos capaces de reanudar
nuestra vida? Solo una cosa tenía clara: ya no era su dulce Shahlaa, no al
menos la que conocía y de la que se había enamorado. Ahora, el lobo que tantas
veces me había poseído, formaba parte de mí; solo rezaba para que no acabara
devorándome.”
Capítulo
9
Hechizos y artimañas.
En la
defensa y en la supervivencia no hay medias tintas y el fin justifica los
medios y más si se trata de una tierra donde impera la barbarie, una Freya
herida física y emocionalmente sintiéndose indigna de su esposo y de Gunnar se
alza como una bruja maldiciendo para hacerse temer y respetar, debe jugar sus
cartas aunque la confusión por su deber en el antes y lo que siente en el ahora
la torture sin contemplaciones.
“La gente, alertada por la pelea, se había empezado a
congregar a nuestro alrededor.
—Todo aquel que se acerque sufrirá mi azote. En la
próxima noche de luna se escuchará un aullido aterrador que reclamará la vida
de esta mujer. Si no la lograra tener, vendrá al pueblo a llevarse cualquier
otra. —Enfaticé mi voz con un tinte teatral y entrecerré los ojos para añadir
un toque grave a mis palabras—. ¡Oh, gentes de bien! Si en algo estiman a sus
seres queridos, arrojen a esta mujer infame a las profundidades del bosque para
satisfacer a los lobos. Solo así marcharán para siempre, y yo con ellos.
Miré con intensidad a los concurridos para recalcar mi
advertencia. Y, por el rabillo del ojo, vi la silueta encorvada y delgada de
una mujer que se escurría entre la muchedumbre. Respiré aliviada, sobre todo al
comprobar el impacto de mi maldición en Amina.”
Capítulo
10
Confesiones de un corazón maltratado
Deber y
razón, corazón y amor, habían pasado dos años desde el infortunio de la que una
vez fue Leonora, había pasado más tiempo con Gunnar que con su marido ¿Qué
pesaba más? Lo cierto para ella era que ya era de otro hombre ¿la querría su
marido así? La duda le desgarraba el alma aunque ya su decisión estaba tomada
sometiéndola a su deseo.
“Él abrió los ojos claramente impactado. Clavó su
felina mirada en la mía durante un largo instante en el que dejé brotar todo el
amor que me inspiraba. Una chispa encendió el claro verdor de su mirada.
Lo había visto.
—Sí —confirmé emocionada—, lo has conseguido, maldito.
Me has robado el corazón. Te amo tanto que este tiempo sin ti ha sido la
tortura más cruel. Y, déjame advertirte algo: si vuelves a tocar a otra mujer,
te juro que te arrancaré los genitales y se los daré de comer a los cuervos.
Me abrazó con tanta fuerza que temí la fractura de
alguna costilla. Cuando me soltó, no esperé ver lágrimas en sus ojos, pero las
había.”
Capítulo
11
Otra boda
La
situación de Freya se complica, el rescate por ella llega cuando no se lo
espera y es Gunnar quien se encarga de llevarla hacia su marido pero en el
camino ya no puede negar su destino y decide enfrentar la situación, antes de
encontrarse con él y hacerle ver lo que ha pasado y el cambio en ella, decide
casarse con Gunnar, el vikingo del cual se ha enamorado y de quien en ese
momento conoce su origen.
“Tan solo faltaba un día para el encuentro y en mi
estómago comenzaba a formarse un nudo tirante e incómodo. Gunnar inmediatamente
notó mi inquietud. Advertí una chispa de temor en sus ojos.
—Mañana volverás a verlo.
Asentí.
Intenté visualizar el rostro de Rashid y me sorprendió
descubrir que no lo lograba. Sus facciones se desdibujaban en una nebulosa
confusa, tan solo sus oscuros ojos acudían a mi mente. Y eran unos ojos
cargados de reproche.”
Capítulo
12
El reencuentro
Volver a
ver a Rashid después de tanto tiempo no es fácil para Freya, la incómoda
situación entre los dos hombres no la va a poder evitar y menos la reacción del
que fue su marido cuando sepa lo que ha pasado y que su Shahlaa ya no existe.
Decidir ella entre lo que siente y lo que debe de hacer no es fácil.
“—Te suplico que confíes en mí y permanezcas al
margen. Está batalla la libraré sola, cualquier intervención tuya podría ser
desastrosa. Veas lo que veas, no te inmiscuyas.
Gunnar palideció.
—¿Vea lo que vea? ¿Por quién demonios me tomas? ¡Eres
mi mujer, maldita sea!
—Pero él no lo sabe, y quiero ser yo quien se lo diga.
Y si él ha venido a reencontrarse con la esposa que perdió, probablemente su
primera reacción…”
Capítulo
13
Huyendo del Pasado
La guerra
entre Gunnar y Rashid inicia y aunque el primero se entera que va a ser padre
el segundo no pierde la oportunidad de recuperar a la fue su mujer aunque la
sepa embarazada y en la menor oportunidad “rapta” a la fue su esposa.
“(…) Unas fuertes manos me sujetaron prestas.
Me debatí frenética, aunque fútilmente; mi captor no
estaba dispuesto a ceder ni un ápice. Me volvió hacia él y me dirigió una
sonrisa triunfal.
—Ahora soy yo el que le roba a su esposa —sentenció
Rashid.”
Capítulo
14
Una puerta cerrada
Un
furioso y transformado Gunnar rescata a su Freya y ésta debe de intervenir para
que no mate a Rashid a pesar de su bajeza, con la ayuda de su tío Rodrigo y los
demás guerreros de Gunnar ella logra su libertad incapacitando a Rashid para
que Gunnar no lo mate. Freya se despide de su tío y regresa con su gigante sólo
para enfrentarse a otro problema en el camino de regreso: la esclava que ella
había comprado se ha interesado descaradamente en su Gunnar.
“Gunnar se alejaba cuando una de aquellas mujeres se
acercó a mí.
—¿Es tuyo? —preguntó en referencia a Gunnar.
Asentí. La mujer observaba la espalda de mi esposo con
expresión envidiosa.
—Ten cuidado, esa gacela lo está acechando.
Seguí la dirección de su dedo índice y me sorprendió
descubrir que apuntaba a Ada. Se hallaba entre el grupo de guerreros pegada a
Ragnar.”
Capítulo
15
El regreso
De
regreso en el poblado donde todo comenzó los esposos esperan comenzar una nueva
vida como marido y mujer, se lleva a cabo la boda de uno de sus guerreros con
la mujer que desea quitarle a Gunnar a Freya, una máscara que para la mujer no
es más que la manera de estar cerca del hombre que le gusta, en esa fiesta los
guerreros se preparan para una batalla que no se puede atrasar y Gunnar debe
partir.
“(…) Entonces dejó de besarme y me miró con
intensidad, paladeando el brutal gozo que me consumía.
—Mira a tu dueño y señor, a tu siervo y adorador. Mía
para toda la eternidad. Tuyo a través de los tiempos.
Con la mirada turbia, susurré suplicante.
—Por favor, por favor, no pares.
—No, mi amor, nunca.”
Capítulo
16
Vientos de tormenta
La
revelación de lo que Freya ya sabía sobre el origen de Gunnar le fue confirmado
pero para colmo con un testigo del mal que tomaría ventaja para sacar provecho.
Las enemigas de Freya se multiplicaban y sabía que enfrentarlas sola cuando
Gunnar se fuera no iba a ser tarea fácil.
“Un escalofrío me recorrió la espina dorsal. De pronto
tuve la sensación de que el mundo se ralentizaba. Fui dolorosamente consciente
de cada latido, de la repentina sequedad de mi garganta, de la pesadez de mi
estómago y, sobre todo, de la expresión victoriosa de mis oponentes. Cada
sensación se entremezcló en un revoltijo de emociones que disparó mis manos
hacia el cuello de Sigrid.”
Capítulo
17
Cuando el infierno abre sus puertas
Riesgos,
pérdidas, engaños, mentiras, violencia, la suerte echada, el camino cerrado, un
destino sellado, el fin que llega azotando. La vida de Freya en esas tierras se
enfrenta a su fatal amenaza, de quien menos lo espera es quien le encaja el
puñal. Su viaje y aventura como Leonora, Shahlaa y Freya termina, tres mujeres
en una sola, los tres nombres del lobo que una vez selló su destino y la
marcaría para siempre.
“Relinchos de caballo, alaridos de dolor infrahumano,
entrechocar de metal, demonios de pelo largo y ensangrentado despedazándose
entre sí. Cuerpos mutilados, retorcidos, amontonados. Oscuridad rota por hebras
rojizas y una lluvia fina, pero persistente. (…)
El dolor que antes me había sacudido regresó, más
punzante. Llevé la mano hacia mi costado y gemí. Entonces entendí su mirada,
sus palabras. Me había condenado.
Miré la sangre que teñía mis dedos, oscura y densa. Me
había apuñalado en el costado mientras gritaba alertando a Gunnar.”
Capítulo
18
El regreso
El vacío
toco fondo en fuertes sacudidas, no era ni el cielo ni el infierno, no era la
Toledo en su esencia musulmana, tampoco eran las frescas e inhóspitas tierras
vikingas del norte, sencillamente era un consultorio médico, el lobo de tres
nombres quedaba atrás otra vez, Victoria Montalbán volvía a su presente y a la
que era su vida en el siglo XXI.
“Todo era conocido y desconocido a un tiempo. Todo
nuevo y viejo. Todo era opresivo y deslucido.
El tráfico, las máquinas, los edificios, las
aglomeraciones, los ensordecedores ruidos, el consumismo, la hipocresía, la
política, los noticiarios, y en definitiva, la rutina tediosa.
Mi alma se marchitaba.
Intentaba reanudar mi vida y fracasaba
estrepitosamente. El corazón me dolía. La soledad resultaba desoladora. Nada me
agradaba, nada me hacía sonreír, en nada encontraba gozo. Solo era feliz por
las noches, cuando soñaba: y siempre soñaba con él. Sentía sus manos sobre mí,
sus hermosos ojos felinos recorriéndome, su boca arrancándome gemidos. Su voz
grave y suave acariciándome, repitiendo sin cesar cuánto me amaba. Veía su
espectacular cuerpo desnudo junto al mío; me elevaba al paraíso.”
“(…) La mujer
que ahora ocupaba su cuerpo era Freya.
Pero una Freya confundida y angustiada que vagaba en
un mundo en el que no encajaba.
Constantemente alerta, a la espera de una señal, un
estremecimiento puntual por la cercanía de un hombre, una sensación, una
mirada, pero nada.
Caminaba por las calles abarrotadas con una sensación
sofocante, añorando los bosques del Norte (…)”
Capítulo
19
El reencuentro
La vida
normal de Victoria ya no podía ser la misma, no después saber que tenía un
pasado en el que había tenido tres nombres y que había sido tres mujeres siendo
una sola, lo que fue pesaba más y la dominaba y aunque se sintiera sola en el
mundo al que no pertenecía tuvo la respuesta que necesitaba y mejor aún
volvería a los brazos del hombre que amaba con locura, él también la buscó y su
amor renació como si los siglos no hubiesen pasado, más allá de la muerte, más
allá del tiempo, más allá de la misma eternidad, el poder y la promesa de dos
almas unidas resurgía y era el vínculo más poderoso e inquebrantable que los
protagonistas de esta historia podían experimentar. Habían renacido para
reencontrarse y para volver a amarse.
“Gunnar besaba mi cuello palmo a palmo.
—¿En qué trabajas?
Apenas me miró para seguir su particular sendero de
besos por mi mandíbula.
—Soy granjero y me va muy bien. Proveo a todo el
municipio.
—¿De veras? —musité, estaba perdiendo el hilo de mis
pensamientos. Recordé que ese siempre había sido su sueño.
—Gunnar —insistí—. Yo soy restauradora de
antigüedades.
—Lo sé —musitó distraído—. Lo sé todo de ti.
—Y ¿hay algo antiguo por aquí que pueda restaurar?
Levantó el rostro y me sonrió.
—Sí, hay algo muy, muy antiguo. Mi corazón.
Me besó intensamente y con minuciosidad. Una vez más,
sumergidos por el deseo, nos perdimos.
Nuestros cuerpos se unieron con afán, con una dicha
infinita, nuestras almas se fusionaron en una sola.
Ahora, por fin, compartíamos el mismo destino.”
Será que
porque los capítulos tienen título me llamó más la atención, juro que quise
resistirme a Gunnar, lo intenté pero llegando al capítulo 10 ya no pude y caí,
lo que este libro me hizo sentir en el momento se lo hice saber por privado a
su autora ¿Han vivido la aventura de los tres nombres del lobo? Esta lectura si
es una continua montaña rusa de emociones, si todavía no te has dejado seducir
por las letras de su autora, si todavía tus sentidos no despiertan al encanto
musulmán y a la excitante esencia vikinga, si quieres una experiencia diferente
en donde otras lenguas se pueden volver parte de ti y atrapante, si realmente
quieres leer literatura en español este es el libro. La autora ya ha anunciado
una secuela de esta historia que será publicada en
Octubre y que se titula “Tras las huellas del lobo” Gunnar y Freya volverán
pero presiento que no solos, si ellos renacieron ¿Qué impide que sus enemigos
también lo hagan?
Por mi
parte esperando con ansias su continuación.