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domingo, 28 de marzo de 2021

Crepúsculo – Stephenie Meyer

 

Título: Crepúsculo

Autor: Stephenie Meyer

Editorial: Alfaguara y también Penguin Random (México)

Año de publicación: 2005

Extensión: 428 o 512 páginas (según la edición)

Sinopsis:

Cuando Isabella Swan se muda a Forks, una pequeña localidad del estado de Washington donde no deja de llover, piensa que es lo más aburrido que le podía haber ocurrido. Pero su vida da un giro excitante y aterrador una vez que se encuentra con el misterioso y seductor Edward Cullen. Hasta ese momento, Edward se las había arreglado para mantener en secreto su identidad vampírica, pero ahora ya nadie está a salvo, ni siquiera la persona a quien él más quiere: Isabella.

 

Una historia de vampiros que por su idea y punto de vista, vino a revolver el avispero en lo que se conocía del género vampírico y generar polémicas, esa sin duda ha sido la saga “Crepúsculo” que por su “boom” “literario y cinematográfico” atrajo a unos y enfrentó a otros. (Hasta la fecha me sigo preguntando qué pensarán los “eruditos” en la materia) Recordemos que el tema del vampirismo es del género del terror y para adultos pero acá, ni es terror ni es para adultos, sino una fantasía romántica (de amor imposible) y para jóvenes.

La historia trata sobre Isabella Swan, una adolescente que se siente no encajar por su “asocial” y torpe modo de ser, que llega desde su cálido Phoenix hacia un pueblo llamado Forks, (el más húmedo, frío y lluvioso) en el Estado de Washington para mudarse con su padre, el jefe de policía Charlie Swan, tras los deberes de su madre para con su segundo marido que debió viajar por su profesión de deportista. Es en este lugar que al matricularse en el instituto conoce al enigmático y extremadamente atractivo Edward Cullen, quien al principio parece despreciarla sin motivo, causándole repulsión por lo que Edward se ve obligado a ausentarse de clases por varios días. Cuando regresa se retracta de su comportamiento y entabla amistad con ella, comenzando a tratarse. Edward guarda un secreto que se ve alterado cuando la conoce por no poder hacer con ella, lo que hace con todos los demás y eso es leer la mente. Lo que Bella no imagina es lo físicamente atraída que se sentirá hacia el misterioso Edward, en cambio él, desde el principio se da cuenta de que esa criatura, que se cree insignificante, lo atrae de manera intensa sin poder permanecer lejos de ella, tratando de descifrar el por qué, siendo que sólo manteniéndose cerca podrá averiguarlo. Poco a poco Bella se da cuenta de lo extraño que le parece, no son ideas de ella y está segura de que esconde más de lo que le muestra y en esa obstinación y luego de reencontrase con un amigo de la infancia, Jacob Black que le cuenta una extraña historia de su tribu es que ella comienza a atar cabos, dándose cuenta del terrible secreto de Edward; él es un vampiro real. Cuando ella pide las explicaciones y él se confiesa, ella lo acepta, desatándose entre ambos una relación amorosa y conociendo Bella por fin el motivo del rechazo de Edward al principio; no sólo la intensa sed que le provocó su sangre sino que no pudo leer sus pensamientos como lo hacía con los demás y de ahí el que Edward se sienta atraído hacia ella. Sin embargo, cuando la presenta a su familia y es aceptada, se van de juego de baseball y en ese momento son interrumpidos por otro trío de la misma raza que han estado cazando por la zona. Se presentan y cuando pretenden quedar en paz, una leve brisa que mueve el pelo de Bella altera los sentidos del olfato de uno de los recién llegados; James es un cazador y el rastreo su deporte y al darse cuenta de que la chica es humana y protegida de la familia Cullen, sin importarle las consecuencias empezará su letal juego que lo enfrentará con ellos; saciarse con la sangre de Bella. Cuando los Cullen intentan protegerla al sacarla de Forks creen haber engañado a James, pero no es así. Eso sólo avivó la excitación del vampiro, quien la rastrea hasta Phoenix logrando engañarla para que se separe de sus cuidadores, Alice y Jasper (hermanos de Edward) pero con consecuencia desastrosas que casi le cuesta la vida a ella, haciendo que Edward comience a cuestionarse su posición con respecto a su relación y el peligro que supone para Bella.

Los leí en su tiempo pero sin hacer reseña así que debiéndola, me daré a la tarea de hacerla. Con una portada que para mí no es nada llamativa (unas manos sosteniendo una manzana no es algo que me guste ni atraiga aunque tenga un significado) y una sinopsis que no me engancha, se presenta al mundo una historia que tampoco es novedosa. (Salvo por lo que le pasa al vampiro si le pega el sol) A eso hay que añadir que la trama del libro es lenta y su desarrollo igual, al principio cuesta agarrarle el hilo, hay que reconocer que puede aburrir y esto debido al estilo narrativo de la autora que escribió en primera persona y desde la perspectiva de una adolescente “patosa” que en más alguna ocasión quise zarandearla, insoportable por momentos. A esto se le suma que el guapérrimo de la secundaria se fije en ella y como es obvio (por verla diferente) llegue a enamorarse. (Cosas que sólo pasan en la ficción) ¿En serio puede alguien enamorarse de una persona extremadamente torpe y con serios problemas de coordinación? Creo que esa excusa de “protección” no se la cree nadie o tal vez es por el hecho de que se trate de un vampiro “perfecto” que desea volver a la humanidad “imperfecta”. No he tenido la oportunidad de leer el libro en inglés pero la traducción al español no me gustó porque mete mucho “regionalismo” en personajes que es obvio, no van a hablar así. Palabras como “chirrido, porrazo, enchufe, petate” entre otras y así como repetir eso de “fuero interno” fue algo cansino. Un libro extenso por haber mucha descripción y que deja un final abierto para el siguiente porque la historia continúa.

Una de las cosas que más polémica y críticas ha generado esta historia es ese detalle de que los vampiros brillan como diamantes a la luz del sol, cuando se conoce que en realidad, eso los quema y mata (por eso son seres nocturnos) pero hay que respetar la idea de la autora aunque sea algo ridícula, sin embargo, lo que sorprendió en su tiempo no es tanto la historia en sí que en realidad (y como dije, hay que reconocerlo) no es novedosa, (ni tampoco la primera que involucra a vampiros para un público juvenil) acá lo increíble fue el cómo una completa desconocida, una escritora novata, saltó a la fama firmando contrato editorial (exorbitante) por una historia que no es la octava maravilla para luego pasar de los libros al cine, volviendo el asunto un fenómeno mundial. ¡Qué suerte de mujer! No hay duda que el marketing hace magia para quienes lo saben usar para lavar cerebros porque de hecho, hizo más escándalo la producción que los libros.

Sé que muchas fans se van a molestar por este comentario pero esto se los dice una “Team Edward” que fue al cine a ver las películas, que tiene los posters y uno que otro suvenir y que también conoce los libros, así que sé de lo que hablo y sólo doy mi perspectiva como lectora. Los libros y las películas tienen muchas diferencias, yo miré primero las películas y después leí los libros así que al leer ya tenía clara la imagen de cada quien y no al revés como generalmente sucede al imaginar a los personajes y además debo agregar que me gusta más la Bella de las películas que la del libro, es menos torpe, sin duda la actriz la mejoró y ni qué decir de Edward, Pattinson lo interpretó muy bien, soy de las que quise que también me mordiera, definitivamente un “ideal” de vampiro que se desea conocer (aunque a veces saque de quicio también) la ventaja de los libros es que sabes mucho más de lo que muestra una película por eso se recomienda leer siempre. Le doy puntos a las películas por la ambientación y la interpretación de los personajes, pienso que los actores fueron acertados, cuando conocí a Carlisle y a Edward caí en el dilema de no saber quién me gustaba más, si el padre o el hijo, así como me pasó con Legolas y Thranduil en el Hobbit y aunque algunos de los personajes no se asemejan a los del libro, mis reclamos ya no son aceptados. ¿Por qué un autor permite cambios mayúsculos entre sus libros y las películas? Mi única respuesta es que a veces y sólo a veces, la escena del libro merece un cambio para hacerlo diferente a la pantalla, en otras palabras, mejorarlo. Recordemos que como autores, en nuestros libros nos inspiramos en ciertas cosas y así se plasman pero hay quien piense —como guionista y productor— que dicha escena merece un cambio sea para mejorarla o empeorarla. Sin embargo, es este caso, no esperes que los libros y las películas se apeguen porque las diferencias son muchas y en el caso de que sólo hayas visto las películas, te sugiero que leas los libros, hay cosas que no las verás ni sabrás en las películas y en el caso de Crepúsculo, por ejemplo, en el libro se sabe más de Carlisle y Alice. Entre el final del libro y película, prefiero el de la película, lo del libro me pareció muy simple. ¿Ves lo que digo?

Imagino que conoces de sobra la saga, así que no hay mucho qué explicar. ¿Tú también sucumbiste al amor entre Bella y Edward? Hay quienes indican que es tóxico y lo es en cierto punto. La dependencia casi enfermiza “por amor” de ella hacia Edward y las discusiones sobre “la vida” y su visión de la misma por parte de él, así como su deseo por dominar, temas que para ser “novelas juveniles” pone en tela de juicio si son realmente recomendados o no y más viniendo de una escritora que dice es mormona pero la religión es otro asunto. En cuanto al tema vampírico, recordemos que es una visión juvenil del asunto, la perspectiva adulta no será igual ni la aceptará. Luego escribiré la reseña de “Luna Nueva” el segundo libro de la saga, (y la que se cree más tóxica de la serie) en donde conoceremos más de Jacob Black, introduciéndonos ahora en el mundo de los licántropos.

Mi calificación para Crepúsculo (libro 1) sería 3/5


domingo, 14 de marzo de 2021

Moisés y los Diez Mandamientos (parte 2)

 

Título: Moisés y los Diez Mandamientos (Segunda Temporada)

Basada en: Éxodo Cap. 15 al 40, Libros de los Levíticos, Números y Deuteronomio.

Escrita por: Vivian de Oliveira

Producida por: Record TV

Año: 2016

Episodios: 66

Luego de su salida de Egipto y de ser testigos del poder de Dios sobre el ejército del Faraón, el pueblo hebreo acampa en tierra nueva y recibe los Diez Mandamientos pero aún así, un grupo (inducidos por Apuki) cae en el pecado e instan a Aaron a crearles una imagen a la cual adorar, mientras Moisés está en el Sinaí (junto a Oseías, hijo de Nun que lo espera,) pero que por su tardanza lo creen muerto. Dios (a quien nadie puede engañar) alerta a Moisés de la corrupción del pueblo y le ordena volver con las tablas de los mandamientos. Al llegar, en su furia y decepción las arroja al suelo y se enfrenta a la infidelidad de un pueblo, haciéndoles ver el gran pecado que han cometido. Así termina la primera temporada de la serie de 176 capítulos y en ese mismo punto inicia la segunda parte, donde vemos como un “flashback” lo que sucedió.

La historia continúa exactamente dónde quedó, lo cual fue algo muy bueno para no perder el hilo, sólo que ahora ya no veremos más la trama egipcia a la que ya nos habíamos acostumbrado, sino que el escenario es otro, uno que nos preparará para “nuevas aventuras” y el camino hacia la conquista de la tierra prometida por Dios, pero nada será fácil y pronto todo se vuelve una cuesta arriba que enfrentará al pueblo que adora al Dios de Israel con los demás pueblos idólatras, llenos de abominación y perversión.

Era obvio que la historia de esta segunda parte, abarcará lo que resta del libro del Éxodo y los demás del pentateuco hasta llegar al final de Deuteronomio con la muerte de Moisés y la sucesión de Josué. El inicio de la segunda temporada es una vuelta total a la historia que ya conocíamos y se nos había presentado. Los levitas por orden de Dios, dan muerte a los infieles que adoraron al becerro de oro, siendo que Coré, tiene su oportunidad de matar a Apuki y en esa matanza también muere su hijo Jairo y hasta Judith, por tratar de proteger a su hijo y salvarlo. Sólo Ana, la hija de ambos y hermana de Jairo se salva pero superar el suceso le costará por las pesadillas que la aquejan de esa noche, haciendo que retrase el corresponder al amor de Oseías (Josué) y estar juntos ya sin ningún impedimento. Aaron fue perdonado por haberse arrepentido de su pecado y Moisés regresa al Sinaí porque Dios le dará unas nuevas tablas de la ley. Una nueva trama inicia y la guerra ya no será contra el Faraón sino contra el reino de Moab (Números 22) lo cual sólo será el inicio y el detonante para una serie de sucesos que poco a poco irán encajando.

La trama entre el pueblo del desierto y Moab resulta interesante, dando paso a la introducción de nuevos escenarios y costumbres, así como de nuevos personajes que se van agregando, la evolución de los ya conocidos y varias sorpresas inesperadas. Recordemos que la historia es bíblica y quien ha estudiado algo de teología, conoce dichos personajes y también su fin, lo que la escritora hizo con esto es añadir una trama ficticia sobre “lo que pudo haber pasado” y volver la historia más interesante porque en sí, la Biblia no describe tanto la vida personal de los personajes principales como la serie nos hizo ver ni le da tanta importancia a personajes secundarios como lo hizo la serie. Acá se nos mostró el esplendor de Egipto, sus costumbres, personajes que pudieron haber estado en escena como era obvio y que en la Biblia sólo se mencionan sin mayor interés como la hija del Faraón, la vida de Ramsés, la madre de Moisés, la que fue su esposa, su suegro y cuñadas, las costumbres hebreas y el día a día del calvario por el trabajo al que eran sometidos y ese tipo de cosas, pues en la segunda temporada pasará igual. Magníficos escenarios que reproducen a Moab y a Hesbón, sus vestimentas, sus decoraciones, sus joyerías, los majestuosos escenarios del desierto, las tiendas de los hebreos, las caracterizaciones, las ropas, las telas, los utensilios rústicos, todo fue meticulosamente bien construido y el resultado es una serie magistral que nos transporta de inmediato a esos tiempos bíblicos y que de hecho (y en mi caso) nos puede hacer volver a releer la Biblia.

Con una trama intensa que atrapa con cada capítulo así inicia esta segunda parte que en ningún momento decae, al contrario, a medida que avanza toma fuerza. Acá se nos muestra la vida rural de los hebreos en el desierto, su lucha por avanzar, su hambre, su sed, su cansancio y también, sus quejas contra Dios y contra Moisés y el dolor de cabeza que buena parte de estas personas se convierten para el líder hebreo (lucha que veremos a lo largo de la serie) y al que sólo Dios llenó de santa paciencia. Con impresionantes efectos especiales vemos como son alimentados con el maná del cielo y como Dios los guía mientras avanzan a través de una imponente columna de polvo durante el día y una impresionante columna de fuego por la noche mientras acampan. Coré como instigador poco a poco irá sacando las uñas (si en la primera parte me cayó mal, acá en la segunda lo terminé de odiar, cada día esperaba ver esa escena donde Dios por fin le dio su merecido) y no solo sino junto a sus esbirros que también pagan.

Como dije, en esta segunda parte se nos muestra la nueva trama en los reinos de Moab y Hesbón, reinos paganos pero conocemos al primero y a su rey Balac y a las costumbres del lugar. En una escena anterior vemos como Jetro y sus hijas van a encontrarse con Moisés al desierto, decidiendo la mayoría de las muchachas quedarse en el lugar junto a su hermana Séfora y entonces, después de esta visita, Jetro regresa a Madián sólo para recibir una invitación del rey Balac por las festividades del reino, asunto que le traería serias consecuencias. A este viaje lo acompañan sólo las dos hijas que se quedaron con él; Betania y Adira con su marido e hijos y un siervo de ellos. En el camino se encuentran con una escena desgarradora, un rito hacia los dioses de Moab en el que consiste ofrecerle bebés por voluntad propia a la imagen que adoran y quemarlos en una hoguera, al ver esto la familia se asusta queriendo regresar pero uno de los guardias del rey los obliga a continuar el camino y no desairar al rey. Es aquí donde Betania recuerda sus días paganos como sacerdotisa de Asera y se revela que tuvo una hija que debió ofrecer personalmente en un ritual de sacrificio pero que no pudo, entregándosela a Balaam, el supremo sacerdote para que él lo hiciera. Este recuerdo comenzará a perturbarla en su estadía en Moab, lo que la familia no se imaginaba era lo que se les tenía deparado y una serie de sucesos se desencadenarán desde este punto en adelante haciendo que la trama se intensifique por el vuelco que toma y mantenernos pegados al sillón con cada nuevo capítulo.

Betania no se imagina reencontrarse con Balaam quien al decirle que su hija está viva y no la sacrificó, es la manera de manipularla para sus planes, planes que también tiene el rey Balac y en su perversidad, asesina al esposo de Adira por desear casarse con ella y tenerla como as bajo la manga como cuñada de Moisés y tenerla como pieza clave en caso de un ataque hebreo, también manda a eliminar a Jetro por no estar de acuerdo con sus planes. Es desde este punto donde parte casi toda la trama de esta segunda parte, porque cuando Coré llega al campamento hebreo con un moribundo nadie se imagina que se trata de Zur, príncipe de Moab y cuñado del rey, que ha sido enviado como espía y con quien Coré tiene un trato oculto. Cuando Balaam ayuda a Betania para que su familia escape de Moab, el trato es que es ella se quede y se convierta en la nueva esposa de Balac, todo a cambio de saber sobre el paradero de su hija, a quien desea recuperar al saberla viva. Cuando Jetro (que lo sacaron dado por muerto) y Adira y sus hijos y su siervo, logran salir de los dominios de Moab gracias a Balaam, comienzan su travesía por el desierto para dirigirse al campamento hebreo y buscar a Moisés para hacerle saber todo lo que ha pasado, pero en el trayecto no se imaginan el triste destino que les espera. Cuando se quedan sin comida, sin agua y sin rumbo, una precipitada Adira, por la desesperación de obtener agua y comida para sus hijos, junto a su padre miran una carreta de mercaderes con provisiones y ella (ante los ruegos de Jetro de no hacerlo) decide asaltar la carreta siendo sorprendida por uno de los hombres, Jetro al ver la escena intenta defenderla y protegerla pero sin éxito, los hombres lo atacan hiriéndolo y a ella la secuestran, poco después el siervo Natán y los niños de Adira lo encuentra moribundo y sin poder resistir la herida de espada muere en el desierto. Lo entierran y ellos deciden continuar el viaje ya solos. Adira ha sido llevada al reino amorreo de Hesbón donde la venden como esclava siendo que un pícaro comerciante de telas la compra y la lleva a su casa con la finalidad de que ayude en la cocina, con la limpieza y también le sirva a él cuando se le antoje pero un día que intenta huir, se topa con el apuesto Orén, general del rey quien se prenda de ella desde que la mira, deseando volver a encontrarla y saber quién es. En la vagancia de Natán y los niños por el desierto tiene la desgracia de encontrarse con Coré, que viene de Moab por orden de Moisés junto con otros, en cuenta Josué (Oseías) pero sólo él se encuentra con el siervo y los niños y al saber quiénes son, ataca a traición a Natán creyendo que lo ha matado y se lleva a los niños de vuelta a Moab por orden de Balac.

La trama es un tira y afloja llegados a este punto, los escenarios se dividen entre el campamento hebreo, Moab y Hesbón. Como dije en la reseña anterior, la historia está bien escrita a manera de narrativa, teniendo como base los libros del pentateuco y adentrándonos ya de lleno a la historia de Moisés de una manera más íntima, quizá como nunca antes se había tratado. Esta serie resultó ser magistral en todos los aspectos, desde los escenarios, la ambientación, el vestuario, las actuaciones y hasta los mismos efectos especiales que impresionaron tanto, igual a las plagas de Egipto y una de las escenas que más esperé y disfruté fue cuando la tierra se abrió para que se tragara a Coré y compañía, eso fue glorioso. La construcción del Tabernáculo, los utensilios y el Arca del Pacto, hacernos ver ese proceso de construcción fue algo acertado. Cuando se ha leído la Biblia y conoces a los personajes y sus historias, obvio ya sabes cómo va a acabar todo, pero esta serie lo ha hecho de manera excitante yendo más allá de lo que la Biblia no cuenta o indagando más de lo que ya muestra. Las interpretaciones estuvieron a la altura de la historia así como la evolución y madurez de los personajes. La Miriam que conocimos en la primera temporada ya no es la misma en esta segunda, se volvió más insoportable en todos los sentidos, conocimos a una Joana, amiga de Ana, que vivía resentida con Dios. Vimos a un Simut y a un Gahiji (los egipcios de la primera temporada) adaptándose a las costumbres hebreas y a la vida en el desierto, el primero se enamora de una de las hermanas de Séfora y el segundo reconoce que se ha enamorado de Leila, su mejor amiga y con quien comparte el gusto por la cocina hasta que se casan. Vivimos la sabiduría de Jetro y de Jocabed hasta que doliera la muerte de ambos, al igual que la muerte de Eliseba, la esposa de Aaron, tras un ataque enemigo al campamento. Odiamos a Damarina, la hermana de Séfora que enamorada de Josué quiso separarlo de Ana y evitar que se casaran. Nos hicieron respetar a un Aaron más maduro como sumo sacerdote así como al mismo Moisés y su autoridad como líder hebreo. Nos emocionó las bodas como la de Josué y Ana y por fin la de Miriam con Hur, en fin, esta segunda parte no decayó en ningún momento pero si debo poner dos peros que en lo personal poco me gustaron; la forma tan abrupta de pasar de un solo “cuarenta años” y ese capítulo final que lo sentí muy apresurado, como si en una hora quisieron meter lo que les faltaba y ya, resolviendo muy rápido todo; la toma de Moab, el encuentro de Betania con su hija perdida, el encuentro de Adira también con sus hijos… Y otra cosa es el vuelco que le dieron al personaje de Balaam y el cambio de su trama, no lo conocí hechicero de Balac y ya hubiese sido el colmo que el asna no le hablara como lo dice la Biblia pero si extrañé otra de las escenas en la serie y fue la de la serpiente de bronce relatada en Números 21:4.

Éstas son las referencias bíblicas tomadas en esta segunda parte:

Del libro del Éxodo:

*El agua amarga – Cap. 15:22

*Dios da el maná – Cap. 16

*Guerra con Amalec – Cap. 17:8

*Visita de Jetro – Cap. 18

*Israel en el Sinaí – Cap. 19

*Los Diez Mandamientos – Cap. 20

*El Arca del Testimonio – Cap. 25:10

*El becerro de oro – Cap. 32

*El pacto renovado – Cap. 34

*La obra del Tabernáculo – Cap. 35:10

*Llamamiento de Bezaleel y Aholiab – Cap. 35:30

*Construcción del Tabernáculo – Cap. 36:8

*El Arca y el mobiliario del Tabernáculo – Cap. 37 y 38

*Vestuario de los sacerdotes – Cap. 39

*Moisés erige el Tabernáculo – Cap. 40

*La nuble sobre el Tabernáculo – Cap. 40:34

Del libro de Levítico

*Leyes para los hebreos – Cap. 1 al 9

*El pecado de Nadab y Abiú – Cap. 10

*Más leyes – Cap. 11 al 27

Del libro de Números

*Nombramiento de los levitas – Cap. 1:47

*Bendición sacerdotal – Cap. 6:22-27

*Jehová envía codornices – Cap. 11

*Miriam y Aaron murmuran contra Moisés – Cap. 12

*Misión de los doce espías – Cap. 13

*Rebelión de Israel contra Jehová – Cap. 14

*Jehová castiga a Israel – Cap. 15

*La rebelión de Coré – Cap. 16

*La vara de Aaron florece – Cap. 17

*Agua de la roca – Cap. 20

*Muerte de Aaron – Cap. 20:22

*Arad ataca a Israel – Cap. 21

*Los israelitas rondan Moab – Cap. 21:10

*Israel derrota a Sehón – Cap. 21:21

*Israel derrota a Og – Cap.21:31

*Balac llama a Balaam – Cap. 22

*El ángel y el asna de Balaam – Cap. 22:21

*Balaam bendice a Israel – Cap. 22:41 y Cap. 23

*Israel acude a Baal-peor – Cap.25

*Josué, sucesor de Moisés – Cap. 27:12

*Venganza de Israel contra Madián – Cap. 31

Del libro de Deuteronomio

*Moisés no entrará a Canaán – Cap. 3:23

*Cántico de Moisés – Cap.31:30 y Cap. 32

*Se le permite a Moisés ver Canaán – Cap. 32:48

*Muerte de Moisés – Cap. 34

 

La escena posterior (en la serie) cuando el Arcángel Miguel y Satanás contienden por el cuerpo de Moisés, se lee en Judas 1:9

Me he quedado con tal vacío televisivo que no habiendo nada más que ver hasta me divorcié del canal. Pasar casi un año disfrutando esta historia es como si regresaras de viaje luego de un año y ves tu casa extraña y sin poder adaptarte, así pasa cuando estás acostumbrada a una rutina y luego que acaba ya no encuentras qué hacer, es algo así como la resaca literaria, te acabas un buen libro, uno que lo viviste tanto que al terminar ya no encuentras qué leer para sustituirlo. Así es esta serie, un listón muy alto para la productora, estuve leyendo sobre las demás series que tienen pero creo que ninguna va a superar a Moisés. Desde los efectos de su intro cuando se forman en piedras las tablas y la escenografía del desierto, hasta el efecto plasmado al final de cada capítulo. Las escenas de batallas, la valentía de Josué, la aparición de los ángeles fortaleciendo al ejército hebreo y peleando por ellos, la muerte de Moisés, en fin… definitivamente esta serie es una delicia para disfrutar de principio a fin. Dura casi el año en su totalidad con 242 episodios, es por eso que uno convive con los personajes todos los sucesos, con unos ríes, con otros lloras, a unos amas, a otros odias, en fin, lo que no se puede negar es que vives junto con todos los personajes esta historia. La serie es una completa maravilla que sumado a su banda sonora, me quedaría sin adjetivos para calificarla, creo que de todas las canciones románticas la más bonita sigue siendo el tema de Moisés y Séfora, la serie tiene unos temas orquestales preciosos, sólo resumo diciendo que ha sido la mejor serie bíblica que he visto, sin duda, esta se lleva el primer lugar. Muy recomendada para volver a revivirla de principio a fin. Mi calificación es el 100%